Terminar con la enseñanza del uso de amalgamas dentales en todas las escuelas de odontología para 2023
Es el camino directo hacia la odontología libre de mercurio, es posible, esencial, factible y realista.
El Convenido de Minamata, ratificado por 135 países del mundo, tiene por objetivo proteger la salud humana y el medio ambiente de las emisiones y liberaciones antropogénicas de mercurio y compuestos de mercurio, por lo tanto, los países parte tienen el compromiso de cumplir con este mandato.
El mercurio es un elemento que está presente de forma natural en el aire, el agua y los suelos, la exposición incluso a pequeñas cantidades puede causar graves problemas de salud, es peligrosa para el desarrollo intrauterino en las primeras etapas de vida, y tóxico para los sistemas nervioso e inmunitario, el aparato digestivo, la piel, pulmones, riñones y ojos.
Para la Organización Mundial de la Salud, este metal es uno de los diez productos o grupos de productos químicos que plantean especiales problemas de salud pública.
Uso del mercurio en la odontología
El mercurio es utilizado en odontología para la elaboración de las amalgamas empleadas en la restauración de los dientes tratados por caries, práctica que se remonta a más de 150 años atrás.
La odontología libre de mercurio es esencial, la amalgama es un dispositivo contaminante y perjudicial para los dientes, representa un riesgo para la salud de los pacientes, especialmente para los niños y las niñas, y un peligro en las clínicas dentales, especialmente para las mujeres en edad fértil. Las consecuencias ambientales de la amalgama son graves, ya que su mercurio envenena el pescado y las verduras que se consumen. La amalgama vierte mercurio tóxico en mares, lagos, ríos, bahías, entre otras fuentes de agua. La mayor parte de lo que sale de las clínicas dentales, que viene de los dientes restaurados, tarde o temprano llega al ambiente.
Por otro lado, la odontología sin mercurio es factible, las alternativas como los ionómeros de vidrio y compuestos son asequibles, amigables con los dientes, efectivas y técnicamente superiores a la amalgama, y también es efectiva porque gobiernos, dentistas y consumidores se dan cuenta de que la odontología no tóxica es mejor para la salud y al ambiente. Profesionales en la salud bucodental cada vez más utilizan la odontología libre de mercurio, y a su vez, es elegida por los pacientes.
El Convenio de Minamata sobre el mercurio requiere la reducción progresiva del uso de amalgamas, lo que significa que puede y debe reducirse gradualmente a un uso cero, como ya lo han hecho países de distintas regiones del mundo.
A su vez el mercurio es el más volátil de los metales pesados, la amalgama es extremadamente peligrosa para las dentistas y trabajadoras en clínicas dentales, respiran sus vapores tóxicos durante largas horas. Este mercurio se bioacumula en el cuerpo, creando un riesgo neurológico importante – hablamos de daño cerebral permanente – para sus bebés y futuros bebés.
Poblaciones de todos los niveles de ingresos y grupos étnicos, merecen una odontología libre de mercurio. Las clínicas de las escuelas de odontología generalmente atienden a consumidores de bajos ingresos; estas clínicas no deberían utilizar amalgama, dado que estos pacientes también merecen una odontología libre de mercurio.
Eliminar la enseñanza de las amalgamas dentales
Los futuros dentistas deben estar capacitados para colocar solo empastes sin mercurio, y no empastes a base de mercurio. De hecho, muchas escuelas de odontología en la región de América Latina y el caribe han dejado de hacerlo, y las otras regiones deberían seguir su ejemplo.
Para proteger a los niños y las niñas, y futuras generaciones, mantener altos estándares en la odontología, proteger a los futuros odontólogos, trabajadores y trabajadoras en las clínicas dentales, restaurar ríos, lagos y mares libres de mercurio, las escuelas de odontología deben eliminar gradualmente la enseñanza del uso de amalgamas dentales para 2023.
A partir del 2023, los estudiantes de odontología no deberían asistir, y los gobiernos no deberían financiar escuelas de odontología que continúen enseñando la aplicación de amalgamas dentales.
Desde la Alianza mundial por una odontología libre de mercurio, instamos a los gobiernos a cumplir con el mandato del tratado de Minamata,proteger la salud humana y el medio ambiente. Terminar con la enseñanza del uso de amalgamas dentales en todas las escuelas de odontología para 2023, es el primer paso para alcanzar este objetivo.
Alianza mundial por una odontología libre de mercurio
1 de diciembre 2021
Charlie Brown
charlie Brown <charlie@toxicteeth.org>
María Isabel Cárcamo
coord@rapaluruguay.org