Los cultivos transgénicos en América Latina: balance 2024

Las semillas transgénicas, el control químico de malezas, las fumigaciones aéreas y la siembra directa forman parte del paquete tecnológico de los cultivos transgénicos en América Latina. Este modelo ha sido adoptado por pequeños, medianos y grandes productores, en el que se benefician un puñado de empresas transnacionales.

Para incrementar su presencia y poder en la región latinoamericana, las empresas que se benefician de este modelo abogan por la armonización regulatoria a nivel mundial, lo que “es crucial para que las nuevas técnicas de mejoramiento (NBT) contribuyan eficazmente al crecimiento del mercado de semillas, ya que estas disparidades pueden obstaculizar la adopción de tecnología.”

Muchos de sus esfuerzos están puestos en debilitar las regulaciones que prohíben o restringen la liberación de semillas transgénicas en algunos países latinoamericanos, lo que ha desatado la resistencia de las organizaciones sociales y sociedad civil que trabajan en los derechos campesinos y por la soberanía alimentaria.

La industria mundial de semillas está en pleno auge. Este crecimiento está impulsado en gran medida por el auge de las semillas transgénicas, que ahora representan casi el 50% del mercado mundial, a pesar de que sólo cubren el 18% de la superficie mundial de siembra; porque a diferencia de otros cultivos, los transgénicos dependen totalmente de semillas controladas por las corporaciones.

En América del Sur, la región que concentra la mayor superficie de cultivos transgénicos en el mundo, se ha convertido en una zona de sacrificio, donde los impactos de los agrotóxicos en la salud de la población, la ocupación de ecosistemas naturales y los incendios forestales y en humedales, los trastornos climáticos aumentan sin cesar.

Todo esto, para beneficiar a la industria de insumos agrícolas (semillas, agrotóxicos, fertilizantes), y producir piensos para la crianza masiva de animales. Los principales destinos de las commodities transgénicas desde América Latina son China, Vietnam, India, España y Holanda.

El 20% de las exportaciones latinoamericanas de transgénicos corresponde al algodón, el 34% a maíz y el 49% a soja.

A continuación, se hace un repaso de lo que sucede en la región.

ARGENTINA

Los transgénicos significaron para Argentina una transformación desde 1996 debido a la adopción de la soja transgénica con resistencia al glifosato de Monsanto (hoy Bayer).

La soja transgénica cubre la mitad de la tierra cultivable del país y representa un tercio del total de sus exportaciones.  

Se pronostica que la superficie cosechada en la campaña 2024/25 sea de 17,3 millones de hectáreas, un 6% más que el año pasado. Argentina es el tercer mayor productor mundial de soja, representando el 12% de la producción mundial. El pronóstico de producción para este período es de 52,0 millones de toneladas métricas, un 8% más que el año pasado.   

Dado que la soja es tolerante a glifosato, en el país se vierten unos 500 millones de litros de este agrotóxico cada año. El abuso de agrotóxicos es tan fuerte que puede decirse que en Argentina llueve glifosato. En estudios hechos en agua lluvia se ha detectado presencia de glifosato y atrazina en el 80 % de las muestras analizadas.

A lo largo de los pueblos rurales que viven en zonas de influencia de los cultivos de soja transgénica, médicos argentinos y el Instituto de Salud SocioAmbiental han documentado un incremento de casos de leucemia, cáncer, abortos espontáneos y malformaciones en recién nacidos.

En total, aproximadamente 24,5 millones de hectáreas son sembradas con variedades transgénicas A la fecha, en Argentina se han aprobado 78 eventos de cultivos biotecnológicos, incluyendo varias modificaciones en soja, maíz y algodón.

El país quiere posicionarse como un líder en la investigación transgénica; primero con el trigo HB4 y recientemente se anunció que científicos argentinos desarrollaron caballos genéticamente editados de alta performance mediante la técnica CRISPR-Cas9. El trabajo fue hecho por empresa biotech Kheiron S.A.

BRASIL

La superficie plantada de soja en el Brasil ha crecido más de cuatro veces en los últimos 30 años, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). El 1993, el área cultivada con cereales, ocupaban 10,6 millones de hectáreas y en 2023 estaría llegando 44,6 millones de hectáreas en 2023 y 46.100 ha en 2024. Alrededor del 45% de los 96 millones de hectáreas del país están destinadas a estos cultivos.

La superficie sembrada de soja en Brasil hoy equivale prácticamente a toda la extensión territorial de los estados de São Paulo y Paraná juntos. Sólo el aumento de superficie desde 2001 equivale a todo el Rio Grande do Sul. Sólo en el estado de Mato Grosso se destinaron casi 40 millones de hectáreas a la soya transgénica.  

Según el Ministerio de Agricultura y Ganadería, el aumento de la superficie plantada transformó a Brasil en el mayor productor de soja del mundo. En la cosecha 2022/2023 se cosecharon 147 millones de toneladas de cereales. De este total, aquí se consumió nacionalmente 52 millones de toneladas, alrededor del 35%. Las exportaciones fueron de 92 millones de toneladas (alrededor del 65%).

De los 74 millones de hectáreas destinadas al cultivo de los cinco principales granos del país, alrededor del 60% está destinado a la soja. El área ocupada por el cultivo es alrededor de diez veces el área dedicada a las plantaciones de arroz y frijol juntas, granos que forman parte de la tradición alimentaria brasileña.

En Brasil se cultiva el 12% de la producción mundial de algodón. Se estima que la superficie ocupada por el algodón en Brasil supera el millón de hectáreas.

Brasil es el segundo mayor productor mundial de cultivos transgénicos, con 68 millones de hectáreas plantadas con rasgos transgénicos en la temporada 2022-2023. Las tasas de adopción de soja y algodón transgénico fue del 99%, y las de maíz, el 95%. Otros cultivos aprobados son: eucalipto, un tipo de fréjol, caña de azúcar y trigo.

PARAGUAY

La soja continúa siendo el principal rubro del agronegocio en Paraguay. En los últimos 10 años la superficie destinada al cultivo de la soja, ha decrecido en un 2% en la Región Oriental, pero ha aumentado en un 1.339 % en el Chaco, pasando –en esta región del país– de ocupar 4.450 ha en el 2015 a 64.031 ha en el 2022. Esto vino de la mano de la primera aprobación de las primeras “semillas resistentes a la sequía” en 2019. Solo en el Departamento de Boquerón, se cultivaron 43.728 ha, siendo este Departamento uno de los más deforestados del país.

En Paraguay el proceso de adopción de cultivos GM se inició en 2004 con la introducción de la soja tolerante a herbicidas. El Registro Nacional de Cultivares Comerciales señala que hasta el momento se han aprobado un total de 458 eventos transgénicos, de los cuales 58% son de soja, el 41% de maíz y el 1% de algodón. Los rasgos transgénicos adoptados son: tolerancia a herbicidas (41,3%), resistencia a insectos (7%), eventos apilados (51,7%).

Del total de casi 4,9 millones de hectáreas cultivables, la soja ocupa más de 4 millones de hectáreas (esto es el 83,6% del total de cultivos transgénicos). El maíz ocupa aproximada de 1 millón hectáreas que representa el 20% del total de área cultivable. El algodón, muestra una clara tendencia decreciente; cayó de 221 mil hectáreas (que fie el promedio (entre 2000 – 2006), a 2007 (70 mil hectáreas). Actualmente ocupa 15 mil hectáreas.

URUGUAY

En Uruguay se cultivan transgénicos desde el año 2000. Uruguay ha adoptado una postura muy favorable a los cultivos transgénicos, aprobando normativas que permiten la investigación y el cultivo de transgénicos, posicionándose como un actor regional en biotecnología agrícola.

El país es productor de soja y maíz transgénicos, con 1.314 millones de hectáreas cultivadas. Cerca del 83% es soya Bt y tolerante a glifosato y el 17% corresponde a varios eventos transgénicos de maíz.

En Uruguay está también aprobado el trigo HB4 tolerante a sequías y al herbicida glufosinato de amonio.

Hay varios eventos transgénicos en etapas de experimentación.

BOLIVIA

Bolivia produce pertenece al grupo al que Syngenta llamó la “República Unida de la Soja”, junto con Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.

El país siembra soya transgénico desde 2005 en una extensión que al momento cubre un millón 500 mil hectáreas. El 100% de la soya producida es tolerante a glifosato, aunque este año se aprobó la soya transgénica intacta (con genes apilados de resistencia a glifosato y a insectos).

Bolivia exporta soya transgénica a 33 países. Gran parte de las exportaciones están dirigidas a países de la Comunidad Andina.

La movilización de las organizaciones ha impedido la aprobación del maíz transgénico.

CHILE

En el país está permitido y regulado el uso de cultivos transgénicos para la producción de semillas con fines de exportación, destinados principalmente como servicios de contra-estación, y la reproducción controlada de semilla para fines de investigación y ensayos de campo.

La evolución de la superficie sembrada con semillas transgénicas en Chile depende de la demanda de los mercados de destino de la semilla transgénica producida en el hemisferio norte.

Las principales semillas transgénicas producidas en Chile son el maíz, la canola y la soja.

La movilización de las organizaciones ha impedido que se apruebe la siembra de transgénicos para el consumo doméstico.

Chile ha establecido normativas tanto para la edición de genes como para los cultivos transgénicos dentro de un marco que fomenta la investigación y el desarrollo.  

COLOMBIA

Ha implementado regulaciones sobre OGM, alcanzando un hito en el 2023 con 154.677 hectáreas de cultivos transgénicos, incluyendo maíz, algodón y soja.

El maíz transgénico es el principal cultivo transgénicos, con 142.711 hectáreas, representando el 36% de la superficie total de maíz y contribuyendo con más del 50% de la producción nacional.

El algodón transgénico cubre 7.409 hectáreas. Elm90% de la superficie sembrada con algodón en Colombia, es transgénico. Mientras que la soja transgénica, aprobada en 2010 pero comercializada por primera vez en 2023, cubre 4.557 hectáreas.

A nivel experimental se trabaja con papa (a pesar de estar prohibida la papa transgénica en la zona de la comunidad andina), caña de azúcar, sacha inchi (una planta oleaginosa nativa) y arroz.

PROHIBICIONES A LOS TRANSGÉNICOS EN LA REGIÓN ANDINA

Ecuador mantiene la prohibición de los cultivos transgénicos desde 2008, como establece la Constitución.

A pesar de las intenciones de cambiar la condición de país libre de transgénicos a lo largo de los años, la prohibición sigue vigente, y en el país no se producen legalmente cultivos transgénicos.  

Sin embargo, un decreto presidencial establece los mecanismos de aprobación de semillas para registro y comercialización de las llamadas “técnicas de mejoramiento de precisión”, que son transgénicos genéticamente editados.

Venezuela y Perú también han impuesto prohibiciones estrictas a los cultivos transgénicos.

En el caso de Perú, a través de una ley de moratoria (Act No. 27104) hasta el año 2035, con excepción de los OGM para fines de investigación, los utilizados en productos farmacéuticos o veterinarios en el marco de tratados internacionales de los que el país sea parte, y los importados para fines de uso directo como alimento humano o animal o para procesamiento ulterior. En 2024 se expidió el reglamento de la ley.

En Venezuela, la Ley General de Semillas prohíbe de manera expresa la producción, uso y comercialización de organismos genéticamente modificado.

MÉXICO

Un fallo del panel de resolución de disputas del Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC), falló el 20 de diciembre a favor de Estados Unidos en una controversia relacionada con el uso del maíz genéticamente modificado (GM).

El conflicto se originó en un decreto presidencial mexicano emitido en febrero de 2023, que prohibía el uso inmediato de maíz transgénico en la elaboración de masa y tortillas, e instruía la eliminación gradual de este tipo de grano en otros alimentos y en forrajes para animales. Estados Unidos impugnó esas políticas como práctica comercial desleal en virtud del T-MEC.

Según el informe final del panel, las medidas adoptadas por México para restringir el uso del maíz transgénico no están basadas en evaluaciones científicas adecuadas ni en estándares internacionales, lo que constituye una violación al acuerdo comercial.

Esto, ha pesar del informe del análisis científico preparado por CONAHCYT, el Consejo Nacional de Ciencias, Humanidades y Tecnología de México, que muestra los riesgos inaceptables para la salud de los mexicanos que consumen maíz transgénico y el herbicida asociado, glifosato.

El panel determinó que las políticas mexicanas no cumplen con las obligaciones del T-MEC, al no basarse en principios científicos ni en evidencia reconocida a nivel internacional. En consecuencia, México deberá ajustar sus medidas en un plazo de 45 días.

México ha cultivado algodón transgénico en el norte del país desde 2012. A partir de 2019, el gobierno mexicano no ha aprobado nuevos permisos para algodón transgénico y restringió gradualmente las importaciones de glifosato hasta su eliminación en 2024. Al momento hay 88 mil hectáreas con algodón resistente a insectos y herbicidas.

El USDA afirmó que se importan variedades “obsoletas” de semillas de algodón transgénico de Estados Unidos “Esta falta de acceso a semillas transgénicas de calidad comenzará a tener efectos más drásticos para la temporada 2023 y 2024, particularmente en Tamaulipas, donde ya no se producen las únicas variedades permitidas por el gobierno mexicano”.

GUATEMALA

Oficialmente en Guatemala no se cultivan transgénicos. En 2014 a través de un Decreto Presidencial se ha frenado la adopción de transgénicos para la agricultura y la producción de alimentos, aunque si se permite los ensayos de campo.

A nivel regional, el Reglamento Técnico de Bioseguridad de Organismos Vivos Modificados para Uso Agropecuario, que viene de una iniciativa conjunta para Honduras, El Salvador y Guatemala. Este reglamento da camino libre a los transgénicos.

Las organizaciones sociales están en campaña en contra de la aprobación de este reglamento, y han propuesto la llamada Ley de Biodiversidad y Conocimientos Ancestrales, cuya aprobación está pendiente en el Congreso Nacional.

HONDURAS

Honduras fue el primer país en adoptar los cultivos transgénicos en América Central. En 2002 aprobó el maíz transgénico tolerante a herbicidas en 2002. Ese año Honduras aprobó siete variedades de maíz transgénico y permitía el cultivo de arroz transgénico.

Al momento los transgénicos ocupan 55 mil hectáreas de maíz Bt y tolerante a glifosato.

En mayo de 2023 se aprueba el reglamento general de semillas, amparado en la Ley General de Sanidad Agropecuaria con el aval del Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria (Senasa), que prohíbe la utilización de semillas no certificadas, lo que ha sido rechazado por las organizaciones sociales.

COSTA RICA

En Costa Rica se está desarrollando una variedad de banano editado con genoma con resistente a enfermedades de la mancha negra de la hoja (sigatoka) y la Fusarium.

El gobierno publicó cambios en sus regulaciones sobre biotecnología agrícola. Trata a los organismos genéticamente editados como “equivalentes” a los productos convencionales. Incluye además procedimientos simplificados para las solicitudes de transgénicos resultantes de transformaciones vegetales individuales o complejas.

Hasta ahora, Costa Rica ha permitido la producción de semillas de algodón y de soja transgénica, solo para la exportación (sin uso comercial dentro del país), así como el cultivo de piña rosa transgénica para exportación.

Nunca se admitió el maíz transgénico por la resistencia de la sociedad civil en contra de su aprobación.

ALGUNOS CULTIVOS TRANSGÉNICOS

A pesar de la importancia de las semillas transgénicas en el comercio internacional de semillas, en América Latina los cultivos transgénicos se concentran en tres comodities, de las cuales la soya representa el 49% de las exportaciones, el maíz el 34% y el algodón el 20%.

A continuación, se hace un repaso de lo que está sucediendo con el maíz, el algodón; y dada su importancia en la alimentación humana, el trigo HB4, tolerante a las sequías y al glufosinato de amonio.

MAÍZ

América Latina es el centro de origen y diversidad del maíz. Su origen se ubica en las zonas tropicales de México desde donde se dispersó por el continente, donde las comunidades lo adoptaron a sus necesidades culturales y ambientales

El maíz es el cultivo más versátil, y también el más manipulado, por lo que sus aplicaciones industriales son infinitas. En el mundo hay más de 63 millones de hectáreas sembradas con maíz transgénico, lo que representa el 33,6% de la superficie total sembrada con transgénicos en el mundo.
 
Estados Unidos es el mayor exportador de maíz, con más de 58,4 millones de toneladas métricas de exportaciones de maíz en la campaña 2024-2025. Los principales destinos de exportación incluyen México, Japón, Corea del Sur y China. El 90% del área sembrada con maíz en los Estados Unidos fueron variedades transgénicas tolerantes a herbicidas.

En América del Sur, los primeros indicios apuntan a un retroceso de la siembra de maíz. En Brasil, la cosecha de maíz cayó en un 12,2% debido a efectos climáticos. El área destinada al maíz total experimentó una reducción de 1,41 millones de hectáreas. El área sembrada 22 millones 269 mil hectáreas. El 95% de la producción de maíz es transgénico. Las exportaciones están dirigidas principalmente a Asia y Oriente Medio.

En Argentina las exportaciones de maíz de Argentina se vieron afectadas debido a las condiciones secas y el riesgo de la enfermedad de achaparramiento o raquitismo del maíz transmitida por el saltahojas. Las exportaciones más significativas son a Europa y Asia.

Argentina, Chile y Brasil producen además semillas de maíz para la exportación.

Los principales importadores de maíz son: China, México (que importa sobre todo de Estados Unidos), la Unión Europea, Japón y Corea. El principal consumidor es la industria de cría masiva de animales.

TRIGO

El Trigo HB4, es un trigo transgénico desarrollado por la empresa argentina Bioceres. A diferencia de otros cultivos transgénicos que están destinados mayoritariamente para piensos, biocombustibles y productos textiles; el trigo está destinado para el consumo humano directo. Es la principal fuente de carbohidratos y proteínas para muchos pueblos en el mundo. Se lo utiliza de forma ubicua en alimentos cotidianos como pan, fideos/pastas, cuscús y repostería…

Constituye una importante fuente de ingresos para millones de campesinas y campesinos y contribuye a garantizar su soberanía alimentaria, además ocupa más superficie que cualquier otro cultivo comercial en el mundo.

En octubre de 2020, Bioceres recibió la aprobación condicionada del gobierno argentino para la comercialización del trigo transgénico tolerante a la sequía, y al herbicida glufosinato de amonio. Se necesitaba que Brasil también lo aprobara para que tenga relevancia comercial, por ser el principal importador de trigo argentino, lo que ocurrió en noviembre 2021. Luego, se dio un efecto en cascada: en 2022, se aprobó la importación de harina para consumo animal y humano en Nigeria, Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda, y Colombia.

En 2024 se aprueba el trigo transgénico para la siembra en Sudáfrica, a través de la empresa Trigall Genetics, registrada en Uruguay, una joint venture creada por Florimond Desprez y Bioceres.

Fuentes:

BASE-IS (2024). Con la soja al cuello.

BIOTEC-LATAM. https://biotec-latam.com

Blanco D. (2024). Hito de la ciencia argentina: por primera vez en el mundo nacieron caballos editados genéticamente. Infobae.

Cabaleiro F. (2019). En la Argentina se utilizan más de 500 millones de litros/kilos de agrotóxicos por año. Revista Biodiversidad, Sustentos y Culturas.

COTRISA (2024). Brasil: La cosecha de maíz cae un 12,2% mientras que la de soja se reduce en un 4,7%.

FAO (2024). El pronóstico sobre el comercio de cereales se ha revisado a la baja ante la mayor debilidad de la demanda.

INBIO. Cultivos Genéticamente modificados (GM) en la agricultura paraguaya

Pousthomis N. (2023). Transgénicos, soja y la falsa promesa de acabar con el hambre en el mundo. Agencia de Noticas Tierra Viva.

Ministerio de Agricultura y Ganadería – Ecuador (2023). guía técnica para el uso de semillas o cultivos obtenidos mediante técnicas de mejoramiento de precisión. Decreto 063

Suaréz K. (2024). México pierde disputa con Estados Unidos sobre maíz transgénico bajo el T-MEC. https://cnnespanol.cnn.com/2024/12/20/mexico/mexico-pierde-disputa-estados-unidos-maiz-transgenico-orix

USDA-FAS (2024). Estadísticas agrícolas.

Fuente : Red Por una América Latina Libre de Transgénicos (RALLT)

Diciembre 2024